Del "vacío"...

 

... como propuesta

    Por estas coordenadas cada cuatro año transitamos por un período electoral que define un tiempo al que se llama campaña electoral y que supone el espacio para presentar propuestas concretas que respondan a resolver los problemas que “seguramente” los partidos políticos y sus candidatos DEBEN  CONOCER. Más adelante en el tiempo, da lugar a la llamada propaganda donde la situación no mejora porque lejos de presentar planes de gobierno y propuestas, como norma y no como excepción, aparecen estribillos sin sentido, ataques partidarios, ataques personales que hacen visible el vacío de propuestas como comportamiento histórico sin aparente solución inmediata.

    Desde hace tiempos el vacío por la ausencia de contenido para exposición pública de los planes de gobierno es el caldo de cultivo para que irrumpan los agravios que eventualmente pueden ser constitutivos de falta a la norma electoral, pero que nadie da seguimiento y menos, regula.

    El vacío como propuesta se impone una vez más, porque la población no cuenta con la educación política electoral requerida, no por culpa de la misma, sino porque las oligarquías y aristocracias del turno de ayer y el de hoy, se han empecinado en evitar cualquier asomo de educación y en su defecto han propiciado una cultura de compra-venta de voluntades que apela a las sensaciones más estomacales que neuronales. Al final de cuentas el apotegma del Sabio Valle de que la educación es la primera necesidad del estado, tienen un campo de aplicación en la ausencia de formación de la ciudadanía democrática.

    Desde los organismos de cooperación internacional, en su función de ortesis y no de prótesis, hacen esfuerzos de un “acuerdo de paz” para que la sensación térmica del clima político electoral no alcance grados que reanimen y ahonden las disfuncionalidades de la crisis política electoral del 2017, la cual, lamentablemente por decisiones libres, liberales y nacionalistas no han sido superadas a la fecha, día y hora de este comentario, porque al final del asunto la anarquía no tiene ideología y de encender el fuego y apagar la hoguera viven como partidos, pero también como personas individuales.

    El vacío como propuesta de la mayoría de los partidos políticos y de las candidatas y candidatos nos expone como una democracia débil… muy débil, que de momento en el índice de la democracia parece acercarse al autoristarismo que a la democracia imperfecta, aunque sea meramente electoral.

    El vacío como propuesta enfrenta al “comunismo” versus la “expropiación elegante” que provoca que el suelo patrio “Zedes”-prenda en venta buena, bonita y barata, en beneficio de la Cofradía de turno, en su acepción perversa, que nos desgobierna y la cual, aspiramos desaparezca, con la alerta de un escenario donde el cambio no sea solamente de COFRADIA, como ha solido en los últimos años.

    Que el vacío como propuesta no pase desapercibido y despertemos para sacudirnos 12 años de oscurantismo, de saqueo, de venta de la soberanía y de la nacionalidad, entre otras desafortunadas acciones que el partido más grande y organizado ha ocasionado de “buena fe” y evitemos que la versión local de Alí Baba y los 40 ladrones que le persiguen sigan gozando de la impunidad, impune, esa que nos cobija, ocupa y preocupa.

Para reflexión: “El hombre no puede saltar fuera de su sombra”, Proverbio árabe

 

 

 

 Denis Fernando Gómez Rodríguez

Honduras; Centro América

30 de octubre de 2027

  

(1)    Y pronto se va octubre y legará noviembre

(2)De fingir demencia y no senil

 

 

 

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