resultados, participación, financiamiento … ¿”polarización”? y resultado "político”.

De acuerdo a los resultados oficiales del ente rector electoral constitucional ¿…? acudieron a ejercer el sufragio un total aproximado de tres millones doscientos ochenta y cuatro mil setecientos cuatro ciudadanos/as (3,284,704) que en porcentaje se distribuye en 42.95% para el partido oficialista; 41.42% para la entonces Alianza; 17.4% para el tercer partido en oposición y el 0.89% para 6 partidos minoritarios de los cuales dos no alcanzaron al menos un diputado al Congreso Nacional, pero que por “inaplicabilidad” suprema judicial decretada en el 2014, no desaparecerán del mapa político electoral.

De los seis millones veinte mil ciudadanos/as convocados (6,000,020), la participación alcanza el 54.74%. El resto del 100% no acudió al proceso comicial corresponde a dos millones setecientos quince mil trescientos diez y seis (2,715,316); de los cuales un millón viven fuera del país y el resto no participó por diversas razones (una que pueden ser reales y las que no lo son, forman parte de la “ficción electoral” autóctona que no tiene ideología).

El costo de las elecciones generales es de al menos cien millones de Lempiras (L.100,000,000.00) que en una aproximación en “voz alta” significa que la participación de cada uno de los diez partidos políticos se “invirtieron” diez mil millones de Lempiras (L.10,000,000.00); sesenta millones de Lempiras para cerca del 1% de votación que no alcanza ni el dos por ciento de las firmas requeridas para la inscripción como partidos políticos. Las aproximaciones de valor son contraproducentes para un país con precariedad económica concurrente y que este alto “costo de mantenimiento de la democracia” (como lo aduce D. Zovato) se convierta en un gasto “improducente” y alta “carga pública” a nivel de la creación de partidos ¿minoritarios? y del no desaparecimiento de los mismos.

De igual, al 2009 se habla de que el país después de la crisis postelectoral se encuentra “polarizado”. Una definición en Ciencias políticas indica que “la polarización es el proceso por el cual la opinión pública se divide en dos extremos opuestos”. En el caso que ocupa en estas coordenadas geográficas corresponderá en primera instancia al porcentaje de participación; del restante 100% es “aventurero” decir que aplica de manera irrestricta; aunque las consecuencias de esta crisis generada por los “reaccionarios” y por los “progresistas” afectan sin duda, a la población en general y por supuesto al país.


De la interpretación del “resultado político” de la elección (no potenciado a nivel comicial, menos evaluado directamente) indica que la sumatoria de al menos el 58.82% de los votos alcanzados por los partidos en oposición en alianza y sin la misma, “demostraron” su rechazo contra la reelección presidencial… inmediata e indefinida y reafirmaron un "sentimiento anti" que se escucha como consigna y como canción. Sin olvidar que dos de los partidos opuestos aceptaron y negociaron el tema y el procedimiento y por lo tanto, encontramos hoy sus “representantes” en el tribunal superior de cuentas y en la unidad de política limpia adscrita al ente rector electoral éstos hechos no dan lugar a la “ficción”.

¡La mentira tiene patas cortas!... y no tiene ideología
“El maestro enseña lo que sabe, pero solamente reproduce lo que él, es” y su acepción política local ¿…?


Denis Fernando Gómez Rodríguez
7 de enero de 2018

Del año nuevo, de la pérdida que duele y de la incertidumbre… pero también de la esperanza que no avergüenza y de las oportunidades.

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