del GOZO
La propaganda de consumo durante esta última temporada del año ha sido orientada, al menos por estas coordenadas temporales, a dar, amar, creer y en otros mensajes el tener gozo. Por cierto, el mensaje del pesebre involucra “nuevas de gran gozo…”. Un gozo diferente a la alegría (porque ésta depende de las circunstancias y cuando no son favorables podemos estar tristes), un GOZO que depende del Señor, de estar bien aún cuando las circunstancias no sean las esperadas. El GOZO del Señor y en el Señor no depende de la temporalidad, tampoco de las condiciones que genere cualquier ingestión de sustancias alucinógenas, de elixires, tampoco depende de intercambio de atenciones, de presentes, de indulgencias y demás. No tiene temporalidad, ni sombra de variación, ni mutación. El GOZO dispensado desde el pesebre implica la paz de Dios y está disponible para todo aquel que cree, acepta y se arrepiente de sus pecados ante su Salvador. En Nehemías 8:10 ante la tarea y la amenaza de la adv